martes, 30 de abril de 2013

Capítulo 18:



Peter: ¿de repente te quedaste sin palabras Esposito? –Algo en su voz sonaba diferente, o tal vez solo lo imaginó, no podía pensar con claridad-

Cuando ella estaba a punto de replicarle, alguien la agarra de un brazo y la acerca hacia él.

La última persona a la que quería encontrarse, además de Peter, era a Maxi, pero allí estaba él, abrazándola por un costado como si fueran amigos o incluso algo más.

Maxi: ¿todo bien Lalita? –Estaba segura que él estaba sonriendo en esos momentos-

Lali: si –contestó tan solo, lo único que quería era seguir su camino-

Maxi: ¿qué hacían charlando ustedes dos? – pregunto con un tono celoso-

¿Él enserio estaba pidiendo explicaciones?

Lo único que le faltaba

Lali: nada, solo chocamos. Mejor me voy –quiso esquivarlo pero él no la soltó-nsoltame Maxi –dijo molesta-

Maxi: ¿hey que te pasa?

Lali: me pasa que ya tengo bastante de estúpidos por un día, me duele la cabeza y lo único que quiero es irme, asique soltame de una buena vez –su voz era tranquila pero claramente transmitía el mensaje. Su paciencia se estaba acabando-

Peter: déjala Maxi

Lali: no necesito que te entrometas Lanzani, ¿por qué no desapareces? En lo posible de la faz de la tierra –harta de escucharlos, se zafó del agarre de Maxi y siguió su camino-

Escuchó como Peter murmuraba algo, seguro malo, sobre ella. Pero no le interesaba saber qué era lo que decía.

***

Gas: ¿estás bien? –preguntó su amigo al verla-

Lali: algo –contestó sin ánimos-

Nico: te ves muy mal –dijo preocupado-

Lali: oh gracias, eso es lo que quería escuchar –contestó irónica-

Nico: sabes que no lo dije por eso, veni sentate –dijo agarrándola de la mano y guiándola a unos cuantos escalones que había en el patio de afuera-

Gas: le decimos a la preceptora y te vas a casa ¿te parece? –Preguntó abrazándola de costado-

Lali: chicos no exageren, en serio, ya se me va a pasar

Nico: ¿ves? Reconociste que algo te pasa

Lali: -suspiró- me siento un poco descompuesta y me duele un poco la cabeza, nada más.

Gas: parece que tenes fiebre La –dijo tocándole la frente-

Lali: no van a parar hasta que me vaya ¿no?

Cande: acá están! Al fin, los buscamos por todo el colegio –dijo mientras se sentaba con ellos-

Rochi: ¿te pasa algo Lali? No te ves muy bien

Nico: no se siente bien

Cande: entonces llamamos a tus papas y que te vengan a buscar

Lali: no pueden, mamá esta con una sesión de fotos muy importante y papá estaba haciendo los planos para no sé quién, un tipo bastante poderoso asique era un trabajo también importante.

Rochi: ¿y tu hermano?

Lali: está en la universidad, creo. No me acuerdo bien los horarios que tiene

Nico: lo llamo y vemos ¿sí?

Lali: -suspiro nuevamente- no se van a dejar de joder hasta que me vaya asique llámalo.

Gas: no entiendo porque te queres quedar si te sentís mal. Sabes que cualquier cosa yo te explico los temas nuevas y te paso los deberes. No te hagas problema por eso

Lali: es que yo en las clases ya aprendo. Sabes lo que me molesta estudiar leyendo las cosas en braille, es muy molesto. –dijo enojandose de solo pensar que tardaría demasiado haciendo la tarea y estudiando-

Cande: no te hagas la cabeza amiga, capaz que no nos dan nada y zafas.

Lali: esperemos –dijo hundiendo su cabeza en el pecho de su amigo-

Nico: dijo que ahora viene, justo estaba haciendo unos trámites. ¿te sentís mejor?

Lali: para nada

***

Cuarenta minutos después ya se encontraba acostada en la cama. El medico la había revisado y le había dejado algunos medicamentos. No era nada grave, solo tenía que hacer reposo, tomar los remedios y en dos o tres días ya se iba a sentir mejor.

Vico: ¿necesitas algo?

Ella negó con la cabeza

Vico: entonces te dejo dormir tranquila, cualquier cosa me llamas.

Lali: Vic –lo llamó despacito-

Vico: ¿sí?

Lali: anda a la universidad, yo me puedo cuidar sola por un par de horas

Vico: no lo digas ni en broma. Sabes que no me voy a ir asique ni te molestes –ella iba a replicar pero un bostezo se lo impidió- dormí y deja de preocuparte

Para cuando su hermano cerró la puerta ella ya estaba profundamente dormida.

Unos cuantos gritos la arrastraron de vuelta a la realidad, despertándola por completo.

Aunque sintió curiosidad prefirió quedarse acostada, escuchando, pero disfrutando al mismo tiempo del calor que le proporcionaba estar acostada. Tampoco tenía fuerza como para levantarse asique ahí se quedó.

Pocos minutos pasaron hasta que todo fue silencio y solo se escuchaban pasos que se acercaban, estaba segura, a su habitación.

Rápidamente cerró los ojos. No quería hablar con nadie.

Alguien entró a su cuarto, y cerró la puerta.

Para completar el combo estaba resfriada, asique no podía oler el perfume de quien se encontraba en ese momento en su habitación.

La persona se acercó a su cama, se agacho frente a ella y comenzó acariciarle el pelo suavemente luego de unos minutos en los que tan solo la observó.

Peter: -suspiró- ¿Qué carajo hago acá? ¿Me podes explicar Esposito? –dijo más bien hablando con si mismo que con ella-

Continuara.....


Holaaa! perdón por desaparecer tantos dias y no subir. pero al fin tengo creactividad y varias ideas. Preparense porque se viene un poco de todo :) 

Firmen y mañana subo mas!

besitos y buena semana

Juli ♥

@amorxca

PD: si pueden recomienden la novela ;)

sábado, 20 de abril de 2013

Capítulo 17:



La carpeta bolo por los aires e impactó fuertemente contra la pared, mientras las hojas se esparcían por toda la habitación.

Enojada, frustrada y cansada era como se encontraba Mariana en esos momentos. 

Alguien golpeó la puerta

Vico: ¿todo bien? –Pregunto abriendo un poco la puerta- ¿se puede? 

Lali: de todos modos vas a entrar –resoplo de mal humor-

Vico: ¿qué pasa?

Lali: odio tener que estudiar así –suspiró-

Vico: ¿y por eso hace más de dos semanas qué estas con semejante mal humor?

Lali: eso no te importa –gruñó-

Vico: sos mi hermanita, obvio que me importa. Si queres te ayudo a estudiar –se ofreció cambiando de tema-

Lali: - suspiró- eso va a ser mejor que intentar descifrar que dicen esos papeles y encima pretender memorizarlos. 

Vico: ¿era necesario tirar las cosas así? Hiciste un quilombo de hojas bastante importante eh! 

Lali: vos te ofreciste ayudarme, yo no te pedí nada asique si te jode tanto juntar las hojas ándate y déjame sola – contestó enojada-

Vico: ey para, era un chiste ¿te podes calmar dos segundos? –Preguntó sentándose junto a ella- ¿qué te pasa la? –Dijo abrazándola- ¿por qué estas así?

Lali: no estoy de ninguna manera Victorio –contestó mientras se aguantaba las ganas de llorar-

Vico: ¿a no? Y desde cuándo me llamas Victorio? ¿Desde cuándo no sonreís mínimamente unas cien veces por día? ¿Desde cuándo contestas mal? ¿Desde cuándo todo lo ves negro? ¿Desde cuándo …?

Lali: BASTA VICTORIO YA ENTENDÍ! –gritó mientras se separaba y lo interrumpía-

Vico: ¿desde cuándo me gritas Lali? No lo pregunto para joderte, solo quiero saber qué te pasa, como te puedo ayudar –suspiro- sos mi hermana, me preocupo por vos –le dijo mientras le acariciaba la mejilla- 

Lali: ¿me abrazas? –le preguntó con los ojos llorosos-

Su hermano no contestó, inmediatamente ya la tenía pegada a su cuerpo, envolviéndola en sus brazos e intentando reconfortarla a pesar de no saber que le pasaba. 

A los pocos segundos las lágrimas abandonaron los ojos de Lali, deslizándose por su rostro hasta terminar en la camisa de su hermano. 

Estuvieron abrazados largo tiempo. Tal vez media hora, tal vez una hora entera o incluso más. No importaba el tiempo que pasara, Vico sabía que ella necesitaba contención, y pese a que era seguro que no le contaría nada, él estaría ahí para abrazarla y apoyarla.

Lali: ¿me vas ayudar a estudiar entonces? –dijo cuando ya no le quedaban más lagrimas para derramar, al menos por esa noche. Una pequeña sonrisa acompañaba sus palabras, no era la misma de siempre pero por algo se empezaba-

Vico: me parece bien, espera que junto las hojas

Lali: -suspiro- te ayudo –dijo parándose y con cuidado caminando hasta la puerta, en donde creía que habían caído - 

Vico: no señorita, usted se va a ir a dar un buen baño, se va a relajar y después si, vamos a estudiar –dijo deteniéndola a mitad de camino-

Lali: pero… 

Vico: pero nada –la interrumpió- anda porque si no, no te ayudo nada -

Lali sonrió un poco, se acercó a su hermano, lo abrazó y dejo un beso en su mejilla. Un simple gracias salió de sus labios acompañando sus gestos. 

Vico ordenó la carpeta y los demás útiles de su hermana, las dejo sobre la cama y mientras la esperaba se concentró en el cuadro de fotos que se encontraba en la pared.

Tenía muchas, las más grandes eran con sus padres, con sus amigas y amigos y otra con él. Alrededor de estas se encontraban muchas de ella de tamaños mas pequeños, haciendo caras, riéndose, posando, leyendo, mirando tele y hasta una en la que estaba comiendo.

Todas eran de antes de su accidente. 

No había ninguna actual, y él sabía que ella afrontaba todo con una fortaleza increíble pero eso no quería decir que no sufriera.

Si pudiera, él le daría sus ojos para que ella pudiera volver a ver. Pero sabía claramente que ella no se lo perdonaría.

Su hermana apareció nuevamente en la habitación, cambiada y peinada, con el pelo mojado y la cabeza llena de dudas.

Se sentó a su lado y él comenzó a explicarle los temas que iban a tomarle en la evaluación de Historia. 

Debido a que Lali no lograba concentrarse estuvieron varias horas estudiando, hasta que a las diez de la noche su mama los llamó para comer, justo cuando habían terminado con todo. 

Luego de una cena, lali se despidió con la mano y fue a su habitación para acostarse. 

Una nueva semana comenzaba, Lali no se sentía demasiado bien esa mañana asique una vez terminado su oral de historia pidió retirarse para ir al baño pero en el camino su cuerpo choco contra otro, específicamente con el de Juan Pedro Lanzani.

Lali: Pedro –dijo seria, sin demostrar los miles de sentimientos que la recorrían por dentro al reconocerlo – 

Era fácil, su aroma era único, la alcanzaba, la envolvía, hacía que su mente comenzara a pensar en miles de cosas. Era una mezcla entre cuero, mar y algo más que aún no lograba compararlo con nada, ni tampoco creía poder hacerlo. Ese era el aroma de él, sin comparación alguna posible. 

Peter: a ver si tenes más cuidado la próxima vez –esas palabras, llenas de desprecio, la arrancaron fuertemente de sus delirios, trayéndola nuevamente a la triste y cruda realidad en la que vivía- 

Lali: ni que lo hubiera hecho apropósito. El que tendría que tener cuidado sos vos, al menos podrías usar un poco mejor el sentido de la vista ya que lo tienes –contraatacó. A pesar de su depresión o lo que sea que le estuviera pasando, no pensaba dejar que nadie la pisoteare a su antojo-

Peter: no me busques Mariana – en su vos había un tono amenazante-

Lali: no te sientas tan importante Lanzani -contestó en un intento de parecer inmune a su presencia- 

Peter: se perfectamente que no podrías resistirte a mi si me acercó lo suficiente –dijo mientras se acercaba lentamente hasta que sus rostros estuvieron separados por tan solo tres centímetros- 

Las respiraciones se mezclaban, el olor de Peter la inundaba, se sentía mareada, perdida, ya no recordaba por qué tenía que estar enojada con él, y lo peor es que sabía que no sería lo suficientemente fuerte para resistirse si él se acercaba un poco más. 

Las ganas de cortar con esos centímetros eran demasiado fuertes. Quería besarlo, rodear su cuello y no soltarlo jamás. 

Olvidarse su maltrato en las últimas semanas, como de un día para el otro comenzó a maltratarla, ignorarla, humillarla en ocasiones, hiriéndola con sus estúpidos comentarios.

Pero nada de eso le importaba, solo quería avanzar, tirarse sobre él y besarlo eternamente.


Continuara....


Perdón por desaparecer tanto, entre las evaluaciones, unos problemas familiares, mi pachorra y la  falta de tiempo no tenia ni ganas ni tampoco mucho tiempo como para sentarme a escribir, veremos que tal va esta semana, aunque tambien viene cargadita...


espero les guste el capítulo y firmen, no se han vagas que para eso ya estoy yo!

besote y disfruten el finde :) o lo que queda de él.

Juli ♥

@amorxca

martes, 2 de abril de 2013

Capítulo 16:



Julia: Juan ya es hora de levantarse, vamos, arriba! –Dijo mientras corría las cortinas permitiendo que los rayos del Sol iluminaran la habitación- 

Capítulo 15:



Lali: no es necesario Lanzani, mi hermano o mi papá me pueden ayudar. Mi mama lo dudo porque le da impresión la sangre y las heridas –dijo con una sonrisa-

Peter: cualquier cosa la propuesta sigue en pie 

Lali: gracias 

Él se perdió en su sonrisa, ¿Por qué diablos tenía una sonrisa TAN hermosa? ¿Por qué tenía esa boca que lo único que hacía era gritar silenciosamente que la besaran una y otra vez hasta que ambos se quedaran sin aliento? ¿Por qué su mente siempre terminaba pensando en ella, en su boca y en besarla eternamente?

Peter: mierda! 

Lali: ¿pasó algo? –Preguntó con cara rara-

Peter: no, solo pensaba en vos alta –contestó enojado por el rumbo que siempre tomaban sus pensamientos- mejor me voy –dijo parándose-

Lali: ¿seguro no te pasa nada? –Preguntó acercándose a él y tomándolo del brazo-

Peter la miro y contuvo su irrefrenable impulso de besarla.

No, no y no. 

Peter: seguro –dijo alejándose para evitar cometer un error- me voy –dicho esto se dio vuelta y comenzó a caminar-

Lali: LANZANI!

Su gritó lo detuvo.

Lali: ¿no te pensas despedir vos?

Peter sonrió. Esta chica iba a volverlo loco.

Lentamente se acerco a ella, dejó un beso sobre su mejilla y sin alejarse le susurró al oído
Peter: adiós Esposito 

Dicho esto se dio media vuelta, se despidió de la familia de Lali y luego sin detenerse ni voltearse se marchó.



Emilia: ¿Paso algo? –dijo irrumpiendo en su habitación y quitándola del entumecimiento en que la había dejado ese beso en la mejilla y sus palabras-

PERO POR DIOS! Solo fue un beso en la mejilla! Y un susurro súper sexi en el odio, eso no podía dejarla en semejante estado de estupidez! POR FAVOR!

Lali: eh? Ah no, no 

Su madre sonrió

Emilia: ¿por qué se fue tan de repente Peter?

Lali bufo

Lali: no lo sé, estábamos hablando y de repente dijo que se iba 

Emilia: ¿y de qué hablaban?

Lali: no seas metida mamá

Emilia: solo fue una pregunta che. Parece un buen chico

Lali: lo es –aseguró ella-

Emilia: ¿cómo se conocieron? 

Lali: eso ya lo sabes mamá, por el colegio, tuvimos que hacer un trabajo

Emilia: pero yo quiero detalles

Lali: pues no los tendrás

Emilia: ¿Te gusta verdad? Es eso 

Lali: no mamá, lo acabo de conocer como me va a gustar, no digas bobadas.

Emilia: no son bobadas eh! Es amor

Lali suspiro

Lali: bueno, ve con tu amor a otra parte porque yo quiero descansar.

Emilia: pero… 

Lali: mama fue un día muy largo, por favor ¿si? –dijo interrumpiéndola- 

Emilia suspiró

Emilia: está bien mi amor, buenas noches

Luego de dejar un beso en la frente de su hija se marchó con mucha intriga, varias dudas y una certeza: entre esos dos, pasaba algo. 

Mientras Tanto Lali se encontraba acostada en su cama pensando…

¿Cómo era posible que hubiera estado tan cerca de besarlo? ¿Por qué había querido hacerlo? ¿Por qué aun quería hacerlo?

Diablos.

Ella se había jurado no estar con nadie, no enamorarse. 

Al menos hasta que su vista regresara, si es que eso ocurría algún dia. 

Aunque lo quisiera, aunque solo fuera un beso o dos, aunque se muriera por dentro debido a sus ganas de besarlo, abrazarlo, reír y pelear con él para siempre, no iba hacerlo.

Aunque él le ofreciera ser amigos con derechos, aunque ella se jurara que solo probaría sus labios una vez, aunque se prometieran no ser nada nunca, ella no se arriesgaría, porque sabía de antemano que su corazón rápidamente se engancharía, su mente comenzaría a delirar, se armaría la re historia solo para terminar con su corazón roto.

Nadie la amaría, nunca. Ella tenía que aceptarlo.

A demás Peter solo estaba intrigado. Él sentía curiosidad frente a una chica ciega, quería saber cómo hacia las cosas, por eso siempre preguntaba.

Tan solo era curiosidad

-¿Y si solo era curiosidad por qué quiso besarte? – Le dijo una vocecita dentro de su cabeza-

-Curiosidad –contestó otra- 

-Tal vez siente lo mismo que tu –acotó otra-

Lali: ¿y qué es lo que siento yo? –Se preguntó a sí misma en voz alta-

Su cabeza era un lió, no encontraba respuestas, estaba agotada, algo traumada por lo ocurrido con Agustín, el miedo que sintió frente a la posibilidad de perder a Zeus, el casi beso con Peter.

Rayos

Necesitaba dormir y callar sus pensamientos de una buena vez.

Lali: mañana será otro día

Luego de un largo suspiro, se metió en la cama, acarició a su mascota una vez más y agradeció que al menos el estuviera bien.

Lali: siempre puede ser peor 

Dicho esto se acostó, cerró sus ojos y finalmente se durmió.

Continuara....



Hola! Chicas la idea era subir caps todos los días, aprovechar el finde largo pero soy una colgada, estuve haciendo otras cosas y bue no escribí una carajo.

Perdón por eso y por este cap cortito y pedorro.

Gracias por leer pese a todo y por su buena onda :) Son lo mas!

Besos genias y buena semana!