viernes, 2 de mayo de 2014

Capítulo 66:



Llevaba horas sentado en la silla frente a la puerta donde Mariana se encontraba descansando. Los demás se habían ido para higienizarse, dormir un poco y alimentarse; pero él no quería irse de allí. 



Pese a que ella no estaba interesada en verlo, él quería estar allí. A pesar de que verlo la pusiera nerviosa, la sobresaltara y a él eso lo destrozará por dentro; él no se iba ir. 


Enfermera: ¿por qué no te vas a descansar? Llevas muchas horas acá, te va hacer mal. –le dijo al salir de la habitación donde Mariana se encontraba descansando-

Peter: estoy bien ¿ella como esta?

Enfermera: dormida, más tarde viene la psicóloga para hablar con ella y empezar con las sesiones. 


Él solo asintió y se quedó mirando el piso, perdido en sus pensamientos. 


Enfermera: ¿querés algo de comer? No podes estar así, no necesitamos más enfermos.

Peter: que simpática –dijo irónico a pesar de saber que ella lo decía con buena onda-  pero no tengo hambre. 

Enfermera: hagamos algo, yo te dejo entrar a verla, a pesar de que no sea hora de visita, y vos comes algo. 

Peter: -la miró- no quiero ponerla nerviosa ni que se altere –dijo segundos después- 

Enfermera: solo no la toques ni trates de despertarla, háblale despacio y no creo que pase nada –sonrió- cualquier cosa apretas el botón y vengo.

Peter: te vas a comer una cagada a pedo por mi culpa

Enfermera: confió en que no vamos a llegar a eso. 

Peter: ¿por qué haces esto? 

Enfermera: para que comas 

Peter: gracias –dijo un minuto después de solo observarla- 

Enfermera: dale –sonrió- entra que yo voy por comida, tenes cinco minutos. 


No esperó un segundo. No necesitaba que se lo dijera dos veces ni mucho menos pensarlo, porque lo único que quería hacer en ese momento era verla, lo necesitaba con todas sus fuerzas. 


Abrió la puerta lentamente, sin hacer ruido. De la misma forma entró y caminó hasta sentarse en la silla que estaba a un lado de la cama y a una distancia prudencial. Quiso acercarse más pero no iba arriesgarse a despertarla y ponerla nerviosa. 


Tampoco iba a seguir apoyando los malos pensamientos, los reproches que él mismo se hacía. En su lugar agradeció que ella estaba “bien”. Le dolía muchísimo lo que había pasado, se lo iba a reprochar siempre pero no servía de nada pensar así, los pensamientos negativos te llenan de rencor, de odio y lo peor de todo, no te dejan avanzar. 


Deseaba acariciarla, correrle ese mechón de pelo que tapaba parte de su rostro, abrigarla mejor, pero se contuvo. 


Ya que lo único que podía hacer era mirarla se dedicó a eso. Observó sus moretones, su pelo desarreglado, sus raspones pero luego se reprochó a sí mismo y decidió concentrarse en sus ojitos cerrados, en sus labios, en esa carita hermosa que tenía, en la forma de su cuerpo… 


Sonrió al recordar su locura, su esencia, su forma de ser, esa fortaleza que tenía y de la cual ahora necesitaría más que nunca. Pensó en los momentos que pasaron juntos y sin querer abusar de su buena suerte y del buen momento, decidió salir, después de todo si tenía hambre.


Sonrió aún más cuando encontró a la enfermera “casualmente” apoyada en la pared cerca de su puerta. Esta le hizo una seña de que lo siguiera y comenzó a caminar. 


La siguió sin decir nada hasta que llegaron al buffet del hospital y ella lo guió a una de las mesas del fondo en donde un plato con comida caliente y un jugo lo estaban esperando. 


Su estómago gruño en respuesta.


Enfermera: y eso que no tenías hambre –se burló-  yo voy a seguir con lo mío, cualquier cosa me buscas en los pasillos. Siempre voy de acá para allá 

Peter: gracias 

Enfermera: -esta se iba pero regresó- y anda a descansar –él se la quedó miró- ella va a dormir por un par de horas más, después tiene sesión con la psicóloga, hasta ese momento no tendremos novedades. 

Peter: prefiero esperar

Emilia: ¿a qué vas a esperar? Tenes una carucha –habló mientras se sentaba y tomaba su mano mientras la enfermera se marchaba en silencio-  anda que yo me quedó y cualquier cosa te aviso. 


El haberla visto, estable y dentro de lo posible bien, lo impulsó para comenzar a cumplir sus promesas y remediar sus errores. 


Peter: me voy a ir, pero a la comisaría. Todavía no pude ir. 

Emilia: me gustaría acompañarte 

Peter: este es tu lugar, y yo estoy más tranquilo sabiendo que me vas avisar cualquier noticia 

Emilia: te prestó mi auto –dijo mientras buscaba la llave en su cartera-

Peter: no –contestó deteniendo su mano- prefiero caminar, necesito pensar un poco

Emilia: necesitas despejar la mente, pensar tanto no es bueno.

Peter: con los pensamientos adecuados si –sonrió-

Emilia: todos necesitamos una pausa –agregó simplemente-


Siguieron conversando hasta que no quedó más comida en el plato, se saludaron y Peter finalmente tuvo tiempo de estar completamente solo y tranquilo. 


Camino despacio y sin apuro. Disfrutando de las pequeñas cosas de todos los días que uno a veces ignora, como el suave viento que lo despeinaba y le llenaba los pulmones de aire fresco, el cálido sol que le daba de lleno en la cara, el bullicio, a veces tedioso pero tan anhelado cuando uno está solo y encerrado,… simplemente todo le parecía maravilloso. 


El mundo es un lugar extraño, retorcido, con caminos intrincados y experiencias impensadas aguardando por nosotros a la vuelta de la esquina. 


A pesar de disfrutar de todo lo que lo rodeaba no dejó de pensar en sus acciones a continuación. De planear lo que iba hacer y de qué manera. 


Sin darse cuenta llegó, en lo que él respecta, demasiado rápido pero mejor poner manos a la obra cuanto antes. 


Entró al lugar y prácticamente casi choca con su abogado.


Joaquín: ¿qué tal el encuentro familiar?

Peter: interesante –respondió después de pensarlo -

Joaquín: no pareces enojado asique tan mal no les fue. Tu hermana avisó que venía más tarde –dijo como si nada-

Peter: si –sonrió- tenía que informarles sobre su no casamiento. 

Joaquín: ¿y la dejaste sola?

Peter: -rió- ella ya es grande, se enfrentó a gente peor que nuestros padres y es su tema. Prefirió hablarlo tranquilos con ellos. Si tanto problema te haces anda a verla y dale apoyo –contestó sin dejar de sonreír- 

Joaquín: mira pibe, no te hagas el vivo porque…


Sus palabras se vieron interrumpidas por la entrada abrupta de su compañera de trabajo y hermana de su cliente, quien murmura mil palabras por segundo en un tono que demostraba claramente cuan enojada estaba. 


Eleonora: acá están, ¿alguna novedad? ¿Cómo esta Lali? ¿Qué se sabe de Sierra? ¿Ya habló con la psicóloga? ¿El chico este declaro algo más? –preguntó sin detenerse a respirar e intercalando su mirada entre los dos hombres que la miraban atónitos- 

Peter: calmate loca! ¿Qué pasó?

Eleonora: nada, dejen de mirarme así y contéstenme 

Joaquín: sé que no te gusta el té pero te haría muy bien uno en este momento

Eleonora: discúlpame señor sabelotodo pero yo no pienso tomar una infusión de vaya a saber uno que mierda, y no te hagas el que sabes lo que me haría bien. Ya que no me quieren contestar voy averiguarlo por mí misma. Permiso –dijo mientras empujaba a ambos y pasaba entre ellos –

Peter: parece que a ella no le fue tan bien

Joaquín: te tendrías que haber quedado

Peter: anda hacerle un te mejor, a mí no me jodas eh! Y no te preocupes que yo mismo averiguo donde está. –y sin decir más nada se fue-


Joaquín se quedó mirando el pasillo por donde ambos hermanos se habían ido, pensando en lo que parecidos que eran y a la vez tan diferentes. Rió sin poder evitarlo y decidió ir tras su compañera, claramente era quien más ayuda necesitaba, el menor de los Lanzani podía arreglárselas solo. 


Rezó por no salir herido y fue en busca de esa rubia que por esas cosas de la vida, sin sentido ni respuesta, lo traía loco.


Continuará...

Estaba un poco bloqueada y bastante ocupada estos días, sigo ocupada pero al menos tengo ideas. 

No iba a terminar así el capítulo pero me copo como quedó. 

Me voy porque tengo que terminar dos trabajos prácticos y estudiar. firmen mucho porque voy a tratar de subir lo antes posible.

Gracias por el aguante único que me hacen!

Saludos y a disfrutar el finde largo para quienes lo tienen ;) 

Besos

Juli ♥

@amorxca

14 comentarios:

  1. me encantooo!!! subii mas novee besos

    ResponderEliminar
  2. Ay ya quiero que lali deje que peter esté a su lado
    Subí más novee porfíss

    ResponderEliminar
  3. K paciencia esta teniendo Peter.
    Jajajajaja,como disfruta picando a Joaquín y Eleonora

    ResponderEliminar
  4. Genia volviste!! Me encanta la nove. Espero el prox. Q estes muy bien, besos.


    Belu :)

    ResponderEliminar
  5. me encantooo

    masssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss

    @x_Ferreyra07

    ResponderEliminar
  6. Pobre Lali, le pasa de todo primero ciega ahora shokeada después que pasará y Peter mas tierno que la mira y recuerda momentos vividos con Lali, aaaah es pura ternura este chico lo amo!!

    ResponderEliminar
  7. Volviste!!!
    Segui!! me encanta!!
    Espero que Lali no siga asi con Peter!!
    @gbv_17

    ResponderEliminar
  8. Ahhhh mas !!!!
    Me da tanta cosa como esta Lali !!!!!
    Y no quiere ver a Peter !!

    ResponderEliminar
  9. estuvo bueno pero tenemos q avanzar con algo q ayude a detener a agus igual vos no te preciones trata de que la inspiracion venga a ti espero q en los trabajos te vaya bien y sean faciles besos

    ResponderEliminar

Si vas a opinar que sea con respeto y buena onda :)